La RSE como motor

De innovación y competitividad para los Juegos del Estado en la sociedad del conocimiento
Responsabilidad Social Empresarial

“El activo más valioso de una empresa del siglo XX era su aparato de producción (máquinas). El activo más valioso de una institución del siglo XXI, tenga o no un carácter comercial, serán sus trabajadores del conocimiento y la productividad de los mismos.” Peter Drucker

Aunque no parezca muy visible, hace tiempo que estamos asistiendo a un profundo e importante movimiento dónde instituciones y líderes científicos, políticos, empresariales y sociales vienen trabajando y convergiendo para impulsar marcos y modelos innovadores que faciliten el tránsito de la vieja sociedad industrial - dónde lo esencial eran máquinas - a la nueva sociedad del conocimiento, dónde lo esencial son las personas. Estos trabajos se han visto plasmados en importantes acuerdos y normativas de actuación aprobados por relevantes instituciones; entre otros encontramos las novedosas normas ISO 26000, el Manual de Oslo, la Estrategia Europa 2014-2020 y las directivas, resoluciones y recomendaciones del Parlamento y Comunidad Europea (recogidos por el Parlamento Español). En todo este proceso destacan dos aspectos. Por un lado, la necesidad de adquirir una nueva visión del trabajo y los modelos empresariales, ya que ningún sector podrá competir ni progresar de forma sostenible si, a la vez, no puede contribuir al progreso de su entorno económico y social. De esta realidad surge la nueva visión, conceptos y prácticas de la Responsabilidad Social Empresarial, como motor de innovación y competitividad; es decir: el paradigma que orientará las diferentes políticas y actuaciones de las empresas que se impondrán en las próximas décadas. conocimiento

Por otro lado, está el nuevo papel que jugarán trabajadores y Pymes como elementos impulsores de los procesos de innovación. Esto, junto a lo anterior, conforma el nuevo concepto del Negocio Social (Social Business) y los sorprendentes y competitivos modelos de liderazgos a “pequeña escala”, o “de abajo a arriba”, que generan. Esto significa que la capacidad de innovación y competitividad de las empresas ya no depende sólo, ni exclusivamente, de los vértices de su dirección, sino esencialmente del conocimiento y papel que asuman todas las personas inscritas en sus redes de producción y comercialización, es decir: de su Capital Social. Pero ¿qué es, qué significa la nueva visión de la Responsabilidad Social Empresarial, también conocida en España como Responsabilidad Social Corporativa? ¿Qué importancia se le otorga a nivel internacional y en los países de la Unión Europea? ¿Qué importancia tiene para la innovación, la competitividad y el futuro de las empresas, especialmente en los casos de Pymes o micropymes como son las Administraciones de Loterías? Encontramos una primera pista en el informe aprobado por el Parlamento Europeo en Febrero de 2013, sobre responsabilidad social de las empresas: comportamiento responsable y transparente de las empresas y crecimiento sostenible - http://www.europarl.europa.eu/sides/getDoc.do?pubRef=-//EP//TEXT+REPORT+A7-2013-0017+0+DOC+XML+V0//ES . En este informe se atribuye a las organizaciones (asociaciones) sectoriales de las Pymes la importante misión de favorecer el intercambio de buenas prácticas en materia de RSE entre las pymes y micropymes que representan, así como las iniciativas que pueden desplegar para “alentar  modelos empresariales innovadores, diseñados para estrechar los vínculos entre las empresas y el contexto social en el que operan”. La Comisión y el Parlamento Europeo señalan la importancia que tienen las Pyme en consonancia con el principio «pensar primero a pequeña escala», y pide apoyar y reconocer las iniciativas experimentales o “enfoques informales e intuitivos de las PYME en relación con la RSE” para avanzar en sus concreciones específicas en los diferentes sectores de la economía donde actúan.

La RSE y los Juegos del Estado

En nuestro país, los Juegos del Estado abordan sus retos de innovación y competitividad desde una posición que, en general, ha mantenido hasta la fecha su compromiso con cuatro de los cinco principios que fundamentaron el origen de los Juegos Públicos, asociados con el nacimiento de los Estados modernos. Estos principios son:

RSE

La RSE y los Juegos del Estado

  1. Sus aportaciones al Estado o Tesoro Público: son juegos de todos, que contribuyen al bien común y a la redistribución de la riqueza.
  2. Su apoyo y compromiso con el Tercer Sector de la economía. Son ejemplares en este caso los sorteos de Lotería destinados a las Asociación de lucha contra el Cáncer o la Cruz Roja, pero también lo es su tradicional apoyo a todo el microtejido que configura este sector en nuestro país: desde fallas y cofradías hasta todo tipo de entidades que dan cobertura a las más diversas necesidades sociales.
  3. Su contribución a la reactivación económica de pequeñas zonas o núcleos poblacionales, debido a sus modelos de reparto distribuido de los grandes premios. El ejemplo más visible lo tenemos con los grandes premios que reparte el sorteo de Navidad.
  4. Sus prácticas de Juego Saludable, entendiendo por tal los juegos de respuesta diferida y tradición compartida, que contribuyen a canalizar el impulso lúdico de los ciudadanos hacía formas de juego saludable.
  5. Nota: un quinto elemento, actualmente relegado, es su compromiso con el papel “educativo” que constituye una de las esencias y consecuencias de los juegos.

Partiendo de esta realidad, la pregunta sería ¿pueden estos cuatro, o cinco puntos, constituirse en nuestro paradigma, en el paradigma de SELAE, en el referente social que puede guiarnos hacía mayores espacios de crecimiento y competitividad? En otras palabras ¿pueden representar estos puntos los pilares que orienten nuestras políticas y actuaciones dentro de la nueva visión de la RSE que necesita desarrollarse y concretarse específicamente en nuestro sector? Pero contestar estas preguntas, requiere despejar antes otras dudas. Por ejemplo, ¿otorga este paradigma valores que faciliten alcanzar acuerdos de colaboración con otros países y favorecer la internacionalización de SELAE?; ¿permitirá a SELAE convertirse en punto de referencia internacional de los operadores de Juegos del Estado, tanto en sus procesos de comercialización como en I+D+I? Por otro lado, resulta imprescindible evaluar otros posibles paradigmas. Por ejemplo, podría considerarse más eficaz el paradigma que identifica el valor de los operadores de juegos con su capacidad de Gestionar el mayor porfolio (número) de juegos posibles y el mayor número de canales o puntos de venta posibles. ¿Aportaría este paradigma a SELAE más valor contestando a los interrogantes antes señalados? Tener claro el paradigma de de una organización es vital por tres razones:

  1. Sin un paradigma claro no es posible alinear en un mismo objetivo a todas las personas que forman la organización, algo vital para poder ser competitivo en el mundo actual.
  2. Sin paradigma se dispersarían y dilapidarían una parte sustancial de las inversiones realizadas para modernizar la organización.
  3. Y, en tercer lugar, y no menos importante, las estrategias de innovación serían muy diferentes en función del paradigma que se siga.

El compromiso de Anapal con el impulso de la RSE. Nuestro primer paso hacia la innovación
 

El juego como herramienta para transmitir valores


El juego como herramienta para transmitir valores[/caption] Anapal, como organización representativa del sector de Pymes especializadas en los Juegos de Estado en España, declara públicamente su compromiso con la nueva visión de la RSE aprobada e impulsada por la Unión Europea y los Gobiernos y Parlamentos de sus países miembros, asumiendo todas las responsabilidades que de ello se derivan.También declaramos nuestra adhesión y compromiso con el Manual de Oslo, aplicando sus principios y procedimientos en las iniciativas que comenzamos para avanzar en la concreción de los principios específicos de la RSE en nuestro sector, especialmente en lo referente a conseguir medidores de competitividad de las innovaciones guiadas por la nueva visión de la RSE.

Nota: El Manual de Oslo es la principal fuente internacional de principios directores en cuanto a recogida y utilización de la información sobre las actividades innovadoras de la industria, sus definiciones han sido adoptadas en la legislación española y son referencia para los organismos públicos.

Para ello, desde Anapal impulsaremos toda una serie de debates e iniciativas prácticas siguiendo las recomendaciones del “Informe de la Subcomisión para potenciar y promover la Responsabilidad Social de las Empresas” (aprobado por todos los grupos parlamentarios) publicado en el Boletín 31 de julio de 2006 Núm. 423 de las Cortes Españolas. De este informe destacamos:“Afirmamos nuestra convicción de que la RSE no es una moda o fenómeno pasajero, sino un nuevo paradigma empresarial imprescindible para dar respuesta a las expectativas de la sociedad y para una competitividad sostenible de las empresas españolasAlgunas de sus recomendaciones:

  • Fomentar medidas de autorregulación empresarial sectorial, impulsadas por las asociaciones empresariales sectoriales.
  • Promover acciones de sensibilización, formación e intercambio de buenas prácticas para empresas.
  • Promover la investigación, desarrollo e innovación (I+D+i) para generar productos y servicios innovadores relacionados con las nuevas demandas sociales
  • Concebir la RSE como una exigencia de la competitividad global
  • Promover actividades de acción social de la empresa. Especialmente se deberá valorar la RSE alineada con la actividad que realizan, asumiéndola como una parte integral e integrada en el propio negocio y gestionada con criterios empresariales
  • Asimismo deben potenciarse y facilitarse las iniciativas de partenariado entre empresas y “tercer sector”
  • Tener voz propia en el impulso de iniciativas internacionales vinculadas a la RSE.
  • En España todavía hay pocas experiencias en este ámbito, y crear foros de aprendizaje así como diseminar las buenas prácticas que se puedan identificar en todos los niveles territoriales, forma parte esencial de dicha política.

Boletín 31 de julio de 2006 Núm. 423

LOGOiPAL
Estas iniciativas, debates, foros y propuestas las llevaremos a nuestras secciones de Debate, Investigación y Formación, donde contamos con las herramientas y recursos del Instituto Profesional de Apuestas y Loterías (IPAL). Una vez que entre todos hayamos obtenido y/o consensuado resultados prácticos o conclusiones de estas iniciativas y foros de debate los iremos publicando en esta sección de RSE. Por tanto confiamos en que muy pronto esta sección se llene de iniciativas prácticas y medidas concretas que contribuyan al progreso de nuestra sociedad, de los Juegos Públicos y de las Administraciones de Loterías.

Anapal, 9 de Junio de 2013

Epílogo: Para una pyme la RSE ha de ser (y sólo puede ser) sinónimo de excelencia en la gestión. Lo que hace especialmente relevante la experiencia de RSE Pyme es justamente que, para las empresas que participan, incorporar la RSE se vincula directamente a la revisión y consolidación de la estrategia empresarial, y les ayuda a mejorar políticas y procesos y a reforzar su identidad y su diferenciación. De aquí su importancia.La RSE empieza a formar parte no solo de la visión empresarial, sino también de la misión. La empresa reflexiona sobre el modelo de sociedad en la que desea vivir, sobre su contribución a esa sociedad y sobre sus responsabilidades desde una perspectiva de cambio y mejora social. Por eso, desde esa perspectiva, la RSE forma parte del núcleo del liderazgo empresarial.Cuando la RSE estructura la confluencia de identidad y liderazgo, la empresa se involucra en la medida de lo posible para ser agente de cambio tanto en su sector como en la comunidad empresarial, en la medida en que considera que el impulso de la RSE es parte de su contribución a la sociedad, pues ya no es capaz de concebirse como empresa —ni de concebir la empresa— sin la perspectiva de la RSE. En este sentido, forma parte de su liderazgo la disposición a compartir el aprendizaje no solo con otras empresas, sino también con organizaciones del sector público y del tercer sector.

Josep. M. Lozano. Profesor de ESADE Bussines School


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